Jan 16-26 Group Show: “ESCRIBAS MEXAS”

In the intersection of graffiti and painting

ZOMBRA, Vlocke Negro, Gianni Díaz, KUBO, Rex Bantron

Un hilo delgado pero resiliente se ha extendido desde los primeros intentos de la humanidad por dejar impreso en las paredes el retrato social. Debe ser, entonces, parte de la fibra de la carne el instinto de pintar. Una solución obvia a una necesidad a veces contable, a veces incontable. El hilo se rastrea a los términos formales de los estudios del lenguaje. La escritura es un reflejo abstracto y visible del lenguaje aún más abstracto e incomprensible del lenguaje interno, y en menor medida de la lengua hablada, ya más estructurada, y que ordena el laberinto de los pensamientos. 

En muchos sentidos el graffiti está más emparentado al mundo de la mente que al mundo ajustado y contrito de la lengua escrita, a pesar de estar escrito. El graffiti vive libre de las reglas que comprimen todo lo que pensamos, y su velocidad rompe la fugacidad de la imaginación y de la fantasía.

El graffiti se siente florecer y morir como esa idea genial que olvidamos escribir. Vive para desaparecer y ello lo convierte en la memoria perfecta. 

Como las pinturas rupestres de los primerxs humanos, el graffiti conlleva un comentario social, aunque indescifrable, igualmente valioso. Señala una presencia y pretende sobrevivir el tiempo necesario para mostrar su mensaje.   

Si por lo regular vemos un nombre, lo que oculta es mucho más pegajoso y denso. Es un millón de ideas explotando. Es un lenguaje salvaje que es intransferible y vivencial, que solo puede expresar una sola persona en un solo momento. Así desafía al lenguaje convencional, que se repite de la misma manera en todxs lxs que lo comparten. Le graffiterx hablará escribiendo en la oscuridad, como si su mero oficio estuviese condenado. Algunxs pocxs lo harán para dejar un rasguño en las estructuras de poder.

El trabajo y obra de Zombra, Vlocke Negro, KUBO, Rex Bantron, Gianni Díaz, y el de muchxs otrxs escribas mexas se extiende por las calles de la ciudad y abarca décadas. Todxs encierran en sí mismxs mundos de los que podemos ver un fragmento pequeño. Pero existen para hacernos recordar la fuerza de lo irracional y la magnitud y sustancia de la imaginación, de la fantasía.